
Qué es el tratamiento del conducto radicular: tratamiento, beneficios y cuidado después del tratamiento / pavo dental blanco
Presentación:
El tratamiento del conducto radicular, también conocido como terapia radical, es un procedimiento dental destinado a salvar un diente gravemente dañado. A pesar de su mala reputación, el tratamiento del conducto radicular es un remedio muy efectivo y necesario para aliviar el dolor, preservar los dientes naturales y restaurar la salud oral. En White Dental Turkey, nos esforzamos por brindar atención dental integral, incluido el tratamiento del conducto radicular, para ayudar a nuestros pacientes a lograr un estado oral óptimo y mantener una sonrisa hermosa. En este blog, compartimos todo lo que necesita saber sobre el tratamiento del conducto radicular, desde el procedimiento en sí hasta los beneficios y consejos para el cuidado posterior al tratamiento.
Qué es el tratamiento del conducto radicular:
El tratamiento del conducto radicular es necesario cuando la pulpa, la capa interna del diente que contiene nervios, vasos sanguíneos y tejido conectivo, está infectada o inflamada como resultado de caries profundas, lesiones o procedimientos dentales repetitivos. Sin una intervención oportuna, la infección puede propagarse, causando dolor severo, abscesos y la consiguiente pérdida de dientes.
Breve descripción del procedimiento:
Durante el tratamiento del conducto radicular, un dentista o endodoncia extrae la pulpa infectada o dañada de los conductos radiculares del diente, limpia y desinfecta la cavidad y luego la cierra para evitar una mayor infección. El proceso generalmente implica los siguientes pasos::
1. Anestesia local: para que el procedimiento sea indoloro, el área alrededor del diente afectado se anestesiará con anestesia local.
2. Acceso abierto: el dentista hace un pequeño orificio en la parte superior del diente para acceder a la cavidad pulpar y los conductos radiculares.
3. Extracción de pulpa: la pulpa infectada o dañada se retira suavemente de los conductos radiculares con herramientas especiales, los canales se limpian y se forman para prepararse para el sellado.
4. Desinfección: los conductos radiculares se limpian y desinfectan a fondo para matar las bacterias y prevenir infecciones repetidas.
5. Sellado y sellado: después de la limpieza, los conductos radiculares se llenan con una sustancia adecuada para el cuerpo llamada gutapercha y se usa un bloqueador para cerrar el orificio, evitando que las bacterias entren.
Beneficios del tratamiento del conducto radicular:
El tratamiento del conducto radicular tiene muchos beneficios:
- Dolor: